Estàvem al mes de
març de 1974. El dia 19 de gener havia començat la construcció de la factoria
de Ford i el dijous 21, “Prensa y Radio del Movimiento”, editora del diari
Levante, trau al carrer el primer especial de los “Documentos de Levante”, el
titulat “Almusafes antes de mañana”, que com diu a la portada “está dedicado a
Almusafes, foco de atención durante los doce últimos meses”.
És un document de
64 pàgines que replega tot un conjunt de reportatges d’Almussafes i les
comarques de La Ribera i L’Horta, a més, de prou publicitat. La portada que es
reprodueix en la foto que s’adjunta conté el Sumari dels temes que es
tractarien dins.
Feia menys d’un any, que Mr. Holmes –vicepresident de Ford Europa–
confirmava als diaris que Almussafes era la zona seleccionada, notícia que
apareixia el dijous 7 de juny
de 1973. Darrere, havia quedat un període de poc més de tres anys de negociació
que acaparà l’atenció del país i que amb aquella notícia aplegava a la seua fi.
Però encara quedava una part complicada que arribaria fins el 21 de novembre
quan acabà el procés complicat de l’expropiació de les terres i aquella nit la
gent cridava en manifestació “Queremos la Ford!”, “Queremos la Ford!”.
El tema donaria per a molt, però en aquesta
ocasió vaig a transcriure el que es diu a la pàgina nou –i continua a la deu– al parlar
del poble, dins el capítol de “El pueblo y sus gentes”:
“La carretera señala: A Alcira. A ambos lados,
los campos: naranjos y hortalizas se suceden sin fin por el terreno llano, que
el asfalto divide, para el observador, en dos partes. Unos pocos kilómetros más
arriba, el indicador nos señala Almusafes, y el pueblo aparece un poco de
improviso ante nosotros: un poco desangelado al principio, las casas alineadas
a ambas partes de la carretera, como si tuvieran miedo de haber robado espacio
a los huertos; luego, hacia el centro ensanchándose, más a la parta derecha,
hacia el camino de Benifaió.
Entrados en el pueblo, un grupo de palmeras nos
da su verde y tímido saludo con reminiscencias orientales, y a ambos lados del
camino y calle principal del pueblo, aparecen laureles alineados, con sus ramas
podadas como setos, algo descuidados y de hojas polvorientas. En los
guardatrincheras de los árboles, cuadrado de cemento o pórtland, están grabados
los nombres de los propietarios de las casas junto a las cuales están situados:
Vicente tal, Amparo cual,…
Avanzando por esta amplia y un poco destartalada
avenida de casas, generalmente de un solo piso, o, a lo más, dos (también
alguna que otra construcción de cuatro plantas, reciente), llegaremos a la
plaza donde está la iglesia: la plaza del Generalísimo, o plaza mayor del
pueblo, urbanísticamente bastante fea y con muy pocas trazas de plaza
principal. En esta plaza es donde la carretera que va a Alcira, se estrecha
entre la construcción de la parroquia y el antiguo Ayuntamiento, y a la derecha
comienza la carretera al vecino Benifaió. En la plaza, además de la iglesia
–con su alto campanario, sus muros pintados recientemente, su ancha puerta, y
su escaso relieve arquitectónico–, está el local del antiguo Ayuntamiento, feo
edificio de ladrillo ocre, ya abandonado, a excepción de unas dependencias que
sirven de aulas de un modo provisional; contiguo al viejo Ayuntamiento se hallan
los locales de la Delegación Local de la Juventud, y detrás de este edificio
que forma recodo, adentrándose en dirección a Benifaió, destaca la silueta
robusta, mil veces retocada, de la torre árabe, la torre que probablemente dio
origen y nombre a la población, como puesto fronterizo aduanero. Allí mismo en
la plaza, frente a la iglesia, la única farmacia del pueblo, y poco más que
decir sobre la plaza, que actualmente no es más que un lugar de paso […]
… a la izquierda, la desviación que lleva a Sollana,
y luego, de nuevo, el campo que se traga a la ciudad, un campos todavía más
espeso y lujuriante que a la entrada del pueblo.”
La descripció és prou detallada, encara que el
que es diu jo no el vaig conèixer sis anys després així, ja que els llorers havien
desaparegut del carrer Major i l’Ajuntament vell i la casa senyorial que
envoltava la torre serien enderrocades al principi de l’any 1981.
Publicat al
Facebook el dia 09-06-2015